EL CORREO ECONÓMICO
DON JOSÉ MARÍA RUÍZ MATEOS, NUEVO VICEPRESIDENTE DEL BANCO ATLÁNTICO
Por Amando BERMEJO
Tres hechos m«y destacados ha tenido la Junta General de Accionistas del Banco
Atlántico, celebrada el pasado día 18 en Barcelona. Porun lado, las claras
opiniones de sus dos máximos dirigentes so/Sre un tema tan importante como la
inflación dentro de nuestn economía; por otro lado los excelentes incrementos
logradifs en el ejercicio de 1976, y finalmente el nombramiento como
vicepresidente del Banco a favor de D. José María Ruiz-Mateos, presidente del
Grupo Rumasa.
En el primero de estos tres
Bultos, (el presidente del Banco, . Casimiro Molins Ribot, habló muy
documentadamente sobre puntos de tanta actualidad como es la inflación y el
paro, que como muy bien dijo eíercen una influencia negativa sobre la economía
española, a través de una multiplicidad de cauces, como son el turismo, las
remesas de emigrantes y las entradas de capital. Factores todos ellos
equilibradores de nuestro tradicional déficit comercial, situando la reducción
de estos ingresos, en difícil situación a nuestra balanza de pagos, que es el
centro de la preocupación del país.
Nuestra inflación, dice,. supera a la del conjunto de los países de la OCDE, y_
comporta una notable erosión dé la practica del ahorro con todas sus
consecuencias. El paro al alcanzar cotas tan elevadas retrae a la inversión como
consecuencia de una incertidumbre surgida .de un doble Irente; el de Tos datos
económicos reales, y el más difuso pero también actuante del proceso del cambio
político.
El vicepresidente D. José Ferrer Bonsoms, es más tájante en sus apreciaciones
sobre el tema de la inflación, y dice que puede ser perfectamente atajada: Solo
hay dice,. una forma directa y rápida de reducir el aumento de nuestros precios:
aumentar la producción, reducir el grado de infrautilización de nuestra
capacidad productiva, .estimular las inversiones; en definitiva, reactivar la
economía. Se obtendría asi un doble efecto positivo, en primer lugar aminorar
los costes unitarios de producción, después incrementar la oferta en el mercado
interior y exterior.
El problema está en el cómo, no se trata de efectuar una política monetaria
irrazonablemente expansiva. Si la política monetaria no es válida por si misma
para llevar la inflación en límites aceptables, ´tampoco lo sería para reactivar
la economía sin pagar una factura demasiado elevada, y jpor tanto inaceptable,
en términos de elevación de precios. Tiene que haber, y hay, otros sistemas no
suficientemente utilizados, quizás por el protagonismo casi • exclusivo otorgado
a la inflación, como variable independiente de .: nuestros problemas".
En el aspecto de.la marcha del ejercicio, el Banco a principios de 1976, adoptó
a la vista de la situación económica, de 1975, unos objetivos muy definidos:
a) Aumento del volumen de negocio en la medida congruente con el logro de una
rentabilidad y seguridad incrementados al máximo.
b) Aumento de la productividad en todas sus facetas y
c) Aumento déla rentabilidad. Estos objetivos se han cumplido perfectamente s
puesto que los Recursos Ajenos crecieron en un 14,9% al alcanzar los 65.000
millones de. pesetas; las Inversiones de Clientes crecieron en un 20,8%
alcanzando los 58.469 millones y la Inversión en clientes en moneda extranjera
llegó a los 11,299 millones de pesetas, con-un fuerte incremento del 60,7%;
produciéndo unos.beneficios líquidos de 850 millones que (igualmente se
incrementaron en un 30,5%.
El dividendo de 1976 (máximo legal), representó un incremento del 23,3% sobre
1975 y loa ín-lices de productividad´ y rentabilidad en relación con el número
de empleados se elevó considerablemente; un 16,4% para los Recursos Ajenos; un
18,9% para ;1 valor añadido neto y un 32,5% para el Beneficio.
En su expansión -comercial, si 1976 abrieron 13 nuevas oficinas y se cerró una,
con lo que al
31 de diciembre se contaba con 82 sucursales distribuidas en 30 provincias,. que
se ampliaban a 87 sucursales con las aperturas efectuadas en los primeros meses
Ae 1977.
El tercer aspecto anunciado, ha sido la modificación de los Estatutos de- la
Entidad, para crear en su Consejo de Administración un nuevo vicepresidente,
cargo que ha recaído en D. José María Ruiz-Mateos, presidente del Grupo Rumasa,
el cual es poseedor del 27% del- capital social del Banco, lo que le permite
tener otros dos consejeros, cuyos nombramientos recaen en los señores Recuero
Albizu y Ros Petit, cesando por tanto los señores Harold William Anderson, que
hasta ahora era representan te del Continental y el señor Boful de Quadras, que-
pasa a ocuparse directamente de Bankunión.