Diario 16/30-octubre-82
señalado al conocer la mayoría absoluta obtenida por el PSOE
que las FAS acatan los resultados electorales
al estar por encima de opciones partidistas concretas como señala la
Constitución.
Se abre así un paréntesis de expectación ante el programa de Gobierno que
Felipe González presentará a las Cortes Generales en la sesión de investidura
como presidente del poder Ejecutivo.
Felipe González podría mantener la actual cúpula militar
El Ejército asimila sin sorpresa el triunfo
Pedro CONDE ZABALA Cover-Diarío 16
Madrid — Destacadas voces militares se apresuraron ayer a señalar que «las Fuerzas Armadas acatarán
tos resultados surgidos de las urnas, ya que están por encima de opciones políticas concretas».
Según publicó ayer un diario madrileño, el secretario general del Partido Socialista Obrero Español se
entrevistó, hace veinte días, al poco de iniciarse la campaña electoral, con el presidente de la Junta de
Jefes de Estado Mayor, teniente general Alvaro Lacalle Le-loup. Esta entrevista no ha sido desmentida y
el citado rotativo asegura que ambos hablaron «a cara de perro», conversaron de los grandes problemas
nacionales «a calzón quitado» y que e! señor González Márquez planteó al pre-JUJEM que el PSOE era
en estos momentos el partido que podría garantizar la unidad del Estado.
Seguirá Lacalle
Pese a la proliferación de algunos rumores sobre la «dureza», en sentido ideológico, del general Lacalle,
nuestras fuentes creen que el nuevo Gobierno socialista no modificará la actual composición de la cúspide
de las FAS y que Felipe González optaría por mantener a los actuales componentes de la Junta de Jefes de
Estado Mayor, teniente general Aseanio (Tierra) teniente general García Conde (Aire), y almirante
Suanzes de la Hidalga (Mar). Debido al carácter «profesional» de la actual JUJEM, mucho más
sintonizada con los problemas específicos de las FAS, añaden nuestras fuentes, que la anterior Junta de
Gabeiras, Arévalo y los hermanos Alfaro, que por distintos motivos tuvo una actuación más política y de
apoyo a los Gobiernos de Suárez y Calvo-Sotelo. Salvo con el presidente de la Junta, Felipe González no
se habría entrevistado con ninguno de .los vocales que representan el mando efectivo de los tres Ejércitos.
E1 Gobierno decide Felipe González, si así lo estimara conveniente y con la ley en la mano, podría
sustituir a los actuales mandos de las FAS. Es el Gobierno, a través de decreto-ley y en Consejo de
Ministros quien designa a los jefes de Estado Mayor de los tres Ejércitos y al presidente de la JUJEM.
Los tres jefes de Estado Mayor, el JEME, JEMA y AJEMA, lo son a propuesta del ministro de Defensa y
el pre-JUJEM, a propuesta del presidente del Gobierno. En cuanto a la persona que pueda desempeñar el
puesto de ministro de Defensa, no hay candidatos firmes. Se ha especulado con la posibilidad de que
fuera designado el actual alcalde de Barcelona, Narcis Serra, y quedan totalmente descartados Enrique
Mugica y Luis Solana, que en épocas anteriores tuvieron cierta proclividad por [os temas militares. En los
momentos actuales, Felipe González se decidiría por alguien que reúna grandes dotes de gestión
administrativa y que merezca el respeto o la obediencia convencida de amplios sectores del estamento
castrense. Este puede ser el gran reto que aguarda af futuro ministro de Defensa, que dicen nuestras
fuentes, si no es Narcis Serra bien pudiera ser alguien de similares características organizativas y, a poder
ser, de mejor sintonización e imagen.
En las últimas semanas, según ha podido detectarse, personas vinculadas al Gobierno de UCD, pero fuera
del partido, habrían estado trabajando «en la sombra» para mantener sus posiciones dentro de la gestión
propia del Ministerio de Defensa y de la industria militar.
El gran reto
El programa socialista en materia defensiva y militar no pasaba de ser un texto conteniendo una serie de
líneas maestras —algo similar al de UCD— con el aliciente de que su ejecución, una vez en el Gobierno,
pudiera ser mucho más decidida que la llevada a cabo hasta ahora por el «tándem» Calvo-Sotelo y Oliart.
La concepción de unas Fuerzas Armadas más sintonizadas con sus homologas europeas, tanto en cuanto a
la enseñanza desde modelos democráticos y más operativas y preparadas en el aspecto puramente militar,
son los retos que deberá abordar el Partido Socialista en los próximos cuatro años. El futuro de nuestra
integración en la OTAN (el PSOE ya se ha definido en contra) y nuestras relaciones bilaterales con los
Estados Unidos (cabrían modificaciones del reciente tratado de amistad en función de la probable salida
de la OTAN) y la política exterior (definir nuestros aliados), tendrán que ser abordados a partir de las
próximas semanas por los socialistas, lo mismo que la reforma del Código de Justicia Militar.