Aguaviva y su "No hay derecho"
Vamos a hacer lo que no nos dejaron
Miguel Bayón
Aguaviva ha sido un fenómeno raro en la escena española. Para empezar, son gente que trabaja en otra
cosa y que, cuando puede, hace actuaciones.
A lo largo de su historial de recitales y discos no queda muy claro si pretendían ser un grupo musical o
teatral. Acaban de presentar un espectáculo en el Valle Inclán, de Madrid, titulado "No hay derecho", que
acaso dé una respuesta al embrollo.
"Es un trabajo basado en nuestro último disco __dicen a D16—. Hemos añadido alguna canción, pero, en
realidad, no tiene nada que ver con el recital clásico. Es un experimento de sensibilidad escénica, que ya
hicimos de algún modo en Italia y Portugal, pero que aqui no habíamos podido. No posee exactamente
una línea argumental, sino una cohesión. Entre diferentes canciones introducimos una serie de discursos
escenificados."
Grupo mixto
Se presentan, entre músicos y actores, once personas. En la dirección y mantenimientos está Arnold
Taraborrelli. La iluminación corre a cargo de Ricardo Duque. Entre los músicos está Vladi Bas.
"Que sepamos —dicen—, ningún grupo específicamente musical ha intentado lo que nosotros aquí. En
rigor, siempre quisimos ser un grupo mixto, entre el teatro y la canción. Lo que ocurrió es que no nos
permitieron hacer lo que queríamos, y tuvimos que circunscribirnos a salir estáticamente en el escenario y
limitarnos a cantar. Ahora volvemos, en cierto sentido, a empezar en la línea que siempre quisimos
seguir."
Años decisivos
Mientras aquí se les conocía por las adaptaciones musicales de poemas de Alberti —su "¿Qué cantan los
poetas andaluces de ahora?" llegó a convertirse en una bandera cultural y cívica más contra la opresión—,
León Felipe, etc., ellos tenían que emprender el confuso camino del se-miexilio. En Italia obtuvieron el
eco escénico que aquí se les negaba. Los últimos años, también para ellos, han sido decisivos
"Este espectáculo no quiere ser sesudo o intelectual. Queremos decir "No hay derecho" a muchas cosas
que, pese a los cambios, aún no han cambiado. Y queremos decirlo adoptando un tono cachondo divertido
y esperanzador. "
Dudaron en aceptar presentarse en una fecha tan mala como el verano, pero como durante el curso
trabajan en otras cosas, se decidieron. Recuerdan ilusionadamente el precedente de "Castañuela 70", que
Tábano estrenó en verano y que fue todo un éxito.