El teniente general Jaime Milans del Bosch, actualmente en prisión a la espera de sentencia firme y que
fue condenado por rebelión militar en la causa del 23-F, se encuentra desde ayer confinado en la isla de la
Paloma, cerca de Tarifa, en Cádiz. Al mismo tiempo era conocido que la incomunicación decretada
contra los tres jefes militares detenidos el pasado sábado no era tan firme. Eí director de la Segundad del
Estado asegura que al menos seis civiles están implicados.
Situada en las proximidades de Tarifa, en la provicia de Cádiz
Milans, confinado en la isla de la Paloma
Madrid El teniente general Jaime Milans del Bosch, condenado por rebelión militar con relación al
frustrado golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, se encuentra confinado desde media tarde de ayer en
el destacamento militar de la isla de la Paloma, próxima a Tarifa (Cádiz), donde fue conducido en
helicóptero desde Sevilla, según pudo saber Diario 16 de Andalucía.
Por otro lado, de los tres jefes militares detenidos el pasado fin de semana con relación a un nuevo intento
fallido de golpe de Estado, el teniente coronel José Crespo Cuspinera, que se encuentra en eí Regimiento
de Transmisiones de El Pardo, a pesar de la incomunicación decretada por la autoridad militar, está
siendo objeto de visitas por parte de compañeros suyos de armas.
El teniente coronel Crespo Cuspinera ha sido recluido en una habitación sin llave de la residencia de ofi-
cíales del c´tado regimiento.
Al centinela que le custodia se le han dado órdenes de que no porte ningún arma, al contrario de lo que es
reglamentario en estos casos.
No obstante, fuentes gubernamentales consultadas por Diario 16 señalaron que ninguno de los tres jefes
militares detenidos había recibido visita alguna en los respectivos acuartelamientos donde se encuentran.
Seis civiles
Mientras tanto, Francisco Laína, director de la Seguridad del Estado, insistió ayer, durante un almuerzo
con periodistas, en relación con la detención de tres militares el pasado día 2, que no ha sido una
operación de un día, sino producto de una investigación continua (levada a cabo por el CESID y por el
Ministerio del Interior, con posterior intercambio de datos»
Añadió que es deseo y preocupación constante del Gobierno facilitar la mayor cantidad posible de infor-
mación, pero que el cauce por el que discurre este asunto es muy estrecho, y se refino al secreto sumarial
establecido por la ley.
Francisco Laína explicó que el descubrimiento del nuevo golpe de Estado es fruto de una labor perma-
nente de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y puso de relieve la excelente interconexión en-
tre el CESID y la Policía.
En este sentido dijo que el Ministerio del Interior no ha cerrado sus investigaciones sobre el 23-F y la-
mentó no haber podido desenmascarar la trama civil que hubo detrás de esa intentona golpista.
«Hemos sido incapaces de aportar pruebas conclu-yentes sobre ¡a participación de civiles el 23 de fe-
brero. Hay certeza moral de que al menos unos seis civiles están implicados en intentona golpista, pero
pruebas, ninguna.» Dijo también que en la actualidad hay unos doscientos teléfonos intervenidos en toda
España.
El director de la Seguridad del Estado dijo que el Ejército no es golpista y señaló que hay ciudadanos
españoles, entre ellos algunos militares, que a lo largo de estos cinco años han intentado utilizar los
medios a su alcance para subvertir el orden.
Refiriéndose al 23-F, dijo que queda mucho por investigar y que esto es tarea de la Brigada Antigolpe so-
bre posibles implicaciones civiles,
En cuanto al traslado de teniente general Milans, Laína dijo que se ha realizado con la autorización del
Consejo Supremo de Justicia Militar y en razón de las visitas que recibía en Madrid; es decir, por precau-
ción.
Reuniones
Por otra parte, el Rey recibió ayer tarde en el palacio de La Zarzuela a los jefes de los Estados Mayores
del Ejército y de la Armada, teniente general Ascanio Togores y almirante Suances de la Hidalga.
El Rey recibió en primer lugar al almirante Suances y posteriormente al general Ascanio Togores.
Aunque de modo oficial no se informó del contenido de los despachos, se cree que el Rey abordó con los
jefes militares el complot militar descubierto el pasado fin de semana.
El Rey recibió, igualmente, al presidente Calvo-Sotelo, con quien, sin duda, abordó el mismo tema.
Hoy se reúne en Madrid el Consejo Superior del Ejército, bajo la presidencia del teniente general Ascanio
Togores.
Para asistir a esta reunión llegaron ayer a Madrid todos los capitanes generales, y, aunque el orden del día
es secreto, no se descarta que el Consejo estudie la situación creada por el intento de conspiración.