ABC. JUEVES 18 DE NOVIEMBRE DE 1976. PAG. 13.
CONGRESO SOBRE LEY ELECTORAL
«LAS CONSTITUCIONES DEMOCRÁTICAS NO SATISFACEN A NADIE» (Maurice Duverger)
Por ser válidas para el juego de todos imponen sacrificios a todos los grupos
Las elecciones a Cortes constituyentes deben realizarse mediante un sistema electoral proporcional con
mínimos, y las elecciones a las Asambleas parlamentarias sucesivas, de apoyo a un Gobierno, por un
sistema proporcional corregid» del tipo alemán, recomendó el profesor Maurice Duverger en su
intervención sobre «Sistemas electorales y tipos de democracia», programada por el Centro d«
Investigación de Técnicas Políticas, dentro del Congreso sobre ley Electoral y sus consecuencias
políticas.
El profesor Duverger, un clásico de la Ciencia Política y uno de los especialistas más influyentes, justificó
su recomendación en base a lo que deben ser unas Cortes constituyentes «Estas —dijo— deben plantear
unas reglas de Juego que sean aceptables por todos y se deben afrontar todos los problemas por difíciles
que sean. En España —precisó— uno de los problemas más graves es el de los deseos autonómicos de la
periferia.»
SACRIFICIOS DE TODOS.—La Constitución debe representar a todos y estaremos ante una auténtica
Constitución democrática cuando nadie esté plenamente satisfecho de ella y todos hayan tenido que
sacrificar algo de sus ideologías. Por ello ea aconsejable para estas Cortes constituyentes un sistema que
permita la representación más amplia posible, que puede lograrse a través de un sistema proporcional con
unos mínimos que, a nivel regional, podrían ser de dos o tres por dentó, y a nivel nacional, aún mas
reducido.
Sin embargo, para las futuras elecciones parlamentarlas de apoyo a un Gobierno sería preferible un
sistema proporcional corregido del tipo alemán o un mayoritario a dos vueltas. En cualquier caso, para
de-cidlTse por uno u otro haría falta conocer cuál es la estructura real del sistema de partidos.
LOS SISTEMAS,—Anteriormente Duverger había calificado el sistema mayoritario a una vuelta como
muy duro, si no se tenían arraigados hábitos democráticos; el proporcional, de peligroso en países con
tendencia al multipartidismo, y el mayoritario, a dos vueltas, como el Idóneo, al menos, para el caso de
Francia. Este último sistema permite que cada partido, en la primera vuelta, defienda su color, y en la
segunda, proceda a las reagrupaciones necesarias.
El profesor y rector provisional de la universidad de Barcelona, señor Jiménez de Parga, se había ocupado
anteriormente de las «garantías electorales», centrándose fundamentalmente en el teim de la financiación.
Tras indicar que en España ya se habían financiado a determinadas asociaciones, afirmó que por las
peculiaridades de nuestro primer proceso electoral, la financiación «a posterior!» no era posible porque
determinados grupos participarían en Inferioridad de condiciones y que, en cualquier caso, no había en el
país una opinión generalizada favorable a la financiación pública.—Roberto VELAZQUEZ.