INFORMACIONES
EL VACIO MUNICIPAL
HOY, festividad de la mas madrileña de las Vírgenes, se inaugura !a nueva plaza de Olavide. Nada mejor
que esta impresionante «tarta» decorativa de cartón piedra para comprobar las consecuencias de una
gestión municipal no democrática, Superando el «crimen): cometido con la plaza de Colón, esta nueva
versión sainetesca «made in Hollywood», de una antigua y castiza plaza madrileña, vale por miles de
comentarios que analizarán el desacierto de unos Ayuntamientos operando a espaldas de las necesidades
colectivas de la ciudad. Desd« cómo se derribó el arquitectónico mercado de Olavide a cómo lia sido
levantado este horrible "pastiche" hay toda un rico muestrario de cómo no se debe administrar una gran
urbe, Coincidiendo con este atentado urbanístico, estético y al simple buen gusto, la Casa de la Villa
recibía ayer tarde, por vez primera, a los líderes de todos los partidos ¿políticos, con motivo de la
recepción ofrecida al señor Alan Poher, presidente del Senado francés y de la Asociación de Alcaldes de
Francia. Todos ellos, desde Alianza Popular hasta el Partido Comunista, han coincidido en señalar la
pronta necesidad de convocar elecciones municipales, a ser posible, antes de que finalice el año. No sólo
por razones técnico-administrativas —como la «tarta» de Olavide—, sino políticas. la, discrepancia existe
en torno a si deben dimitir o no los actuales alcaldes durante este período de transición para que el
Gobierno, el Parlamento o anas comisiones gestoras designen nuevo regidor o administren ellas mismas
los asuntos municipales. Salvo para quienes esta, situación se transforme en ua problema, de dignidad
personal —como el dimitido alcalde de Valencia—, ao parece oportuno realmente iniciar urna cadena de
dimisiones y una serie de nuevos ediles dedo-crátieos, Por ua lado, paralizaría 3a administración
municipal, y por otro, contribuiría a mediatizar la- limpieza de las elecciones municipales. Nombrar hoy a
un experto municipal gubernamental podría ser interpretado como una maniobra preelectóralistá tendente
a conquistar votos. La situación no iba, además, a agravarse macho más de lo que está y los riesgos que se
correrían serían mucho mayores que las mínimas ventajas que podrían alcanzarse con mecos alcaldes de
transición. Sin olvidar que parece prioritario que las Cortes voten una nueva ley de Régimen Local.
Porque la realidad es que los municipios se hallan bajo un tutela je del representante directo del
centralismo burocrático, el todopoderoso gobernador civil que delega sus funciones menores en los
Ayuntamientos. Por otra parte, en lo que se refiere a Madrid y Barcelona, su régimen especial, vigente
desde 1963, constituye el mecanismo para que el alcalde sea un mero delegado del aparato estatal. Las
oirás instituciones político-administrativas que padecemos, por ejemplo, en Madrid, se hallan igualmente
en contradicción con las necesidades colectivas. Ei caso del Área Metropolitana (de los dies miembros;
seis representan al Estado, dos ios nombra el Gobierno y los dos restantes no los elige el pueblo) y el de la
Diputación Provincial, gue languidece como reÍBgio de políticos cesados o aspirantes a «niinistraMes»
del manan», nos ahorran mayores cor mentarlos. Por lo que es preciso que Jas Cortes aprueben el retomo
de las libertades municipales. E! alcalde y los concejales de todos los municipios deben ser elegidos; los
Ayuntamientos, contar con amplia autonomía en una serie de materias municipales establecidas por ley
correspondiente; las Diputaciones Provinciales, gozar de amplia competencia para ocuparse del desarrollo
global fie sus áreas específicas y, fundamentalmente, recortar las atribuciones del Gobierno Civil,
A partir de ahí, las elecciones municipales rematarían la tarea democratizados de los Ayuntamientos. Esos
comicios, sjae sanearán toda la infraestructura de la vida política española, culminarán, a su vez, el
proceso democrático iniciado ahora Justamente un año. Pero no levantemos !a democracia municipal por
eJ tejado de la Alcaldía,.