El viejo Gil-Robles, como entonces
PALMA DE MALLORCA, 5 (DI6 y agencias); —
"Vuelvo después de cuarenta años para dirigirme a un público qme, hoy diferente en sv configuración
biológica, sigue luchando por los mismas ideales de entonces", dijo José María Gil-Robles Quiñones en
un mitin organizado por la Democracia Cristiana mallorquína. Se celebró en la sala augusta, con un aforo
de 1.200 personas. Estaba ocupado el escenario por un gran letrero en el que se leía; "Unión democrática
de las islas Baleares; equipo -para la democracia cristiana", y las banderas de Mallorca y nacional. De
Alianza Popular, afirmó qué "en política, las cosas por su nombre: es el neofranquismo histórico, sus jefes
han sido ministros y gobernantes en tiempos de la dictadura, y aunque ahora se llamen populares, nunca
estuvieron presentes en la voluntad popular y peí siguieron a todos aquellos que creíamos en la
democracia".
Suárez, frivolo
Sobre el presidente Suárez, Gil-Robles dijo: "Arrancó el último de los pétalos de una margarita con
excesiva frivolidad, dado que no tiene por qué mantener en vilo a todo un país pendiente de si se presenta
por Madrid o por Avila." Al terminar esta frase, sonó la ovación más grande de toda la noche.