PAGINAS AGRICOLAS
CULTIVOS - GANADERIA • INDUSTRIAS DERIVADAS
EN EL UMBRAL DE LA PRIMAVERA
FAVORABLE ESTADO DE LOS CULTIVOS POCOS PROGRESOS EN LAS DEPRESIONES
AFECTADAS POR ENCHARCAMIENTOS
La semana que está a punto de terminar comenzó con un cambio sustancial del tiempo que puso orden y
concierto en el campo cuya vida se vÍO alterada súbitamente por una manada de máxima dureza invernal.
Eran de temer nuevas riadas sobre los parajes ribereños anegados ya durante la segunda quincena de
febrero. Pero en ese aspecto todo ha quedado reducido a temerosas crecidas de algunos ríos que, por
fortuna, no han vuelto a lanzar sus aguas por encima de las márgenes. Se han limitado, pues, a
incrementar las reservas hidráulicas que tan importante papel deberán jugar en la palestra de la agricultura
y de la industria al facilitar los riegos y la producción de energía blanca durante el estío.
Eso no quiere decir que las siembras han salido incólumes de la nueva fase de borrascas. Las tierras
depresionarias que se encharcaron anteriormente y estaban oreándose con beneficio para las plantas
afectadas por exceso de humedad y para los trabajos preparatorios de las siembras de primavera, han
vuelto a su estado anterior. Esta circunstancia es tanto más de lamentar cuanto que llegamos al
agotamiento del período en que deben efectuarse tales tareas, aparte de la repetición del daño que habían
sufrido los cultivos de esos terrenos.
Por lo demás, tenemos que valorar como es debido la favorable influencia general de las borrascas
atlánticas de la pasada semana y el predominio de un ambiente más suave que ha contrarrestado los
perniciosos efectos de las heladas y de los vientos secos y ásperos. Además, el temporal atlántico, al
remontar por su fuerte impulso la accidentada orografía que normalmente impide su llegada a la vertiente
mediterránea, ha dejado en las tierras de Levante un verdadero tesoro de humedad det que estaban
especialmente necesitadas sus zonas de secano, en las que preponderan el cereal, la. vid, el olivo y el
almendro. Además de las lluvias, en algunas comarcas altas de ese espacio típicamente agrícola, la nieve
blanda, rápidamente licuada, ha dado al suelo el tempero apropiado, y ánimos a los labradores, quienes
miran ahora con más confianza la evolución de la primavera.
Nos plantamos, por consiguiente, en el auténtico umbral de aquella maravillosa estación, resolutiva del
año cerealista, dominados por la impresión de que no son adversos los horizontes. Sembrados sanos,
tupidos, de intenso verdor, excepto en las ya mencionadas depresiones encharcadas, depresiones que, por
su poca extensión si la comparamos con el área total cultivada, no representa un porcentaje capaz de
modificar la impresión general de campaña estimuladora. En este sentido, están jugando un papel muy
principal los abonos nitrogenados, cuyo empleo (muy abundante, según múltiples referencias que
tenemos) ha estado y signe estando secundado por una meteorología propicia.
Llega la primavera haciendo crugir las abrasadas floraciones de algunos frutales tempraneros de la meseta
alta. Sobre esas briznas de un hálito de vida vegetal truncada, la Naturaleza empieza ahora a dibujar la
mutación campestre de las regiones frías en el portentoso lienzo de las producciones nacionales. Vamos a
ver cómo concluye su obra.
Elíseo DE PABLO