MAS DE UN MILLÓN QUINIENTAS MIL HECTÁREAS
DE VIÑEDOS ES LA MÁXIMA SUPERFICIE DE ESTE SIGLO
Su producción en 1959 se valoró en 9.884.964,000 pesetas
Por ELISEO DE PABLO
TRAEMOS hoy a ia sección de suplementos agrícolas de A B C el gran capítulo de la Vitivinicultura, que
en la renta nacional de España figura, —datos relativos a la cosecha de 1859—con 9.884.864.0(00
pesetas. Son conocidas las grandes vicisitudes por que ha pasado el viñedo español desde que en 1878
aparecieron los primeros focos de la destructora filoxera en Málaga, enfermedad que también se
manifestó dos años más tarde en Gerona, para avanzar después hacia el interior después de la invasión del
litoral en forma concéntrica. En las reglones centrales quedaron a salvo extensas zonas de viñedos,
concretamente en ambas Castillas y en Albacete. También Canarias se libró del azote. Ha de hacerse
notar que, en Europa, Francia fue el primer país que sufrió en aterradoras proporciones los efectos de la
plaga, En realidad no se conoce aún ningún medio eficaz para combatir ese asolado? insecto, que llegó
desde las Estados Unidos al continente europeo, aunque indirectamente se le ha combatido con éxito
mediante la plantación de pies de vides americanas en las cuales se injertan las variedades europeas. Todo
el mundo sabe ia enorme contracción que en nuestro pais ha experimentado el área de los viñedos desde
finales del siglo pasado; primero por el ataque de filoxera ya mencionado, y después por la evolución de
otros cultivos que se consideraban más remuneradores en cuanto se tratase de suelos apropiados para la
transformación, No obstante, se ha podido observar que un constante perfeccionamiento de los métodos
de cultivo y de la lucha contra las e n f e rmedades criptográmicas ha dado por resultado un aumento
considerable de los rendimientos por unidad de superficie y mayor homogeneidad en los indicó de
cosechas, En nuestra opinión, a la economía vitícola se le abre un futuro más esperanzador, que pudiera
teñe» como base esencial la clara tendencia 4 u e se manifiesta hacia el cooperativismo que paulati-
namente va reemplazando a la atomización de los viticultores», atomización que les impedía hacerse
presen. tes en «1 mercado como factor decisivo y operante.
Consideramos de interés actualizar el mapa vitivinícola nacional como punto de partida para lo porvenir.
Para ello hemos solicitado la colaboración de persona tan versada en esta cuestión como don Martín
Mendicute, asesor económico del Sindicato Nacional de la Vid.
He aquí el "peso" de cada clase de vino:
Vinos comunes tintos, 87,67 por .100 do la producción total; vinos comunes blancas. 42,41. Total, 80,08.
Como se ve, los rendimientos generales están decididamente matizados por los vinos comunes u de pasto.
Siguen los rosados y claretes comunes, con el 13,05»por 100. Kl resto c!« la ´producción se reparte entre
vinos finos de mesa, el 2,42 por 100; mistelas, mostos, vermut, etc.. el 3,55 por 100. SUPERFICIE
Según datos aportados al I Congreso Nacional da Ingeniería Agronómica, durante la Cruzada Nacional
resultó destruido un 10 por 100 de la superficie da viñedos que había en España en 1938—alrededor de
1.400.000 hectáreas, poro desde 1940 fue aquélla dilatándose hasta ser en 10B9 de 1.587.365. hectáreas,
Ha aquí la distribución de esa superficie:
Como hemos señalado al principio, la pérdida de superficie durante el Movimiento Nacional fue
recuperada rápidamente, pero con igual rapidez volvió a descender por causas diversas, coincidentes con
la segunda, guerra mundial y posterior ofensiva internacional económica y comercial contra España,
reanudándose la expansión, ya abiertamente, a partir del año 1947, hasta que en 195364 se produce otro
retroceso como consecuencia del grave problema planteado a los viticultores por la caída vertical de los
precios y la paralización del mercado, lo que dio lugar a una larga camparla en A B C en defensa de los
intereses de aquel sector, campaña que
desembocó en la creación de la Comisión de Compras de Excedentes de Vino y da la Comisión
Interministerial del Alcohol a fines de regulación mercantil de los mostos. (Conservamos en nuestro
archivo incontables testimonios de aliento y de gratitud de la colectividad española vitivinícola por la
forma en que la cuestión fue enfocada en estas columnas y por los resultados conseguidos.)
Consecuencia de una mejoría de las perspectivas para la economía vinícola, la superficie de viñedos
volvió a incrementarse, y en esta línea se ha mantenido desde entonces hasta rebasar ostensiblemente la
máxima en el siglo actual.
RENDIMIENTOS
La media nacional de rendimiento por hectárea se clasifica así:
Hl. por Ha.
Cultivo único de secano ...... 13,84
Cultivo asociado de secano ... 11,38
Cultivo único de regadío...... 20,74
Cultivo asociado de regadío ... 12,50
Son notables las diferencias de producción entre unas y otras regiones, diferencias impuestas por el clima,
la modalidad de cultivo y la naturaleza del suelo. Aunque los rendimientos en Francia e Italia, por
ejemplo, son mayores que en nuestro país, hemos de considerar que casi la totalidad de los viñedos
españoles son de secano, conocido lo cual la producción de éstos no se puede calificar de baja, puesto que
se explotan tierras que prácticamente no son aptas más que para ese cultivo. No obstante, es
incuestionable que pueden
conseguirse mayores producciones por unidad ds superficie, como lo demuestra la progresión que en años
de condiciones meteorológicas normales viene lográndose. Esto a parte, hay que considerar también el
elevado grado de oscilación de los rendimientos unitarios de la vid, como lo demuestra el gráfico sobre
evolución de aquéllos desde 1863.
Mientras la media nacional de producción es, en cultivo único de secano, de 13,84 hectolitros por
hectárea, las medias provinciales oscilan alrededor de las siguientes cifras:
MÁXIMAS: Coruña, 35,75; Sevilla. 34,36; Guipúzcoa, 31.93; Barcelona, 31,28; Vizcaya, 28,88; Orense,
28,80.
MÍNIMAS: Las Palmas, 4,20; Granada, 2,84.
En cultivo asociado de secano, la media nacional es dé 11,38 hectolitros por hectárea. Veamos algunas
medidas provinciales;
MÁXIMAS: Sevilla, 31,05; Barcelona, 29,48; Vizcaya, 2046; Badajoz, 2043.
MÍNIMAS: Huesca, 1,86; Murcia, 3,96.
En cuanto al cultivo único en regadío —media nacional de 20,74—, las oscilaciones provinciales son:
MÁXIMAS: Ciudad Real, 34.08; Navarra, 33,63; León, 26,00; Logroño, 25,90.
MÍNIMAS: Zaragoza, 8,87; Murcia, 10,54^
El cultivo asociado en regadío —media nacional de 12,50— tenemos:
MAX3MAS: Logroño, 21,48; Navarra, 18,82; Tarragona, 13,04.
MÍNIMAS: Alicante, 7,30; Zaragoza, 8,04.
PRODUCCIÓN DE VINO
Establecida la debida diferencia entre las clases de cultivó, la producción total de vino en 1959 —
18.833.836 hectolitros— se forma asi:
Obtenida sn secano ... 19.3&1457 Obtenida en regadío. 682.679
Queda, pues, bien de manifiesto el carácter de "secano" de nuestros viñedos que figura en la producción
total con el 07,06 por 100.
VALORACIÓN
En la renta nacional de España, el viñedo figura con la siguiente valoración en 1959:
Pesetas
Productos principales Subproductos ... ......
Total ......
8.790.375.000 1.094,589.000
9.884.964.000
PRODUCCIONES POR CLASES
Su vino tinto común,figuran:
Hectolitros
Navarra coa.................. 747.078
Barcelona.............., ;..... 729.870
Toledo ........................ 650.000
Tarragona ..................... 553.000
Zaragoza .................... 543.130
Estas cinco provincias, con 3.223.078 hectolitros figuran en el mapa de tintos comunes con si 43 por 100
de los mostos de esta clase, de donde se deduce una cierta dispersión de los mismos por el área nacional.
La concentración es mayor por lo que se refiere a blancos comunes, en los que Ciudad Real figura con
2.316,708 hectolitros; Toledo con 1.162.188; Barcelona, con 1.043.810, y Badajos con 800.000, to-
talizando las mencionadas cuatro provincias 5.222.216 hectolitros, representativos del 63 por 100 de la
cosecha nacional de esos caldos.
OTRAS CLASES DE VINO
En vinos rosados, Albacete figura con 539.688 hectolitros —19,80 por 100 de la producción nacional.
En tintos finos, Valencia con 64.120 —37,07 por 100.
En blancos finos, Valencia con 72.930 —48,13 por 100.
En rosados de mesa, Valencia con 30.930 —47,75 por 100.
En licorosos dulces, Valencia con 37.980 —25,65 por 100.
En licorosos secos, Cádiz con 77.800 —35,39 por 100,
En mistelas blancas, Toledo con 100,000 —54,86 por 100.
En mistelastintas, Valencia con 50.140 88,52 por 100.
Espumosos, Gerona con 6.000 —72,88 por 100.
Aperitivos, Tarragona con 7.342 —34.71 por 100.
Ds lo anterior resalta el destacado papel de Valencia en vinos no comunes, tales como tintos y Mancos
finos, rosados de mesa, licorosos dulces y mistelas tintas; Gerona se significa por 1a importancia de su
producción de vinos espumosos. Toledo, por la ds mistelas blancas; Cádiz, en licorosos secos, y Albacete,
en rosados comunes.
En los primeros veinticinco años de este siglo, nuestra producción vitícola tuvo un interés eminentemente
comercial. España estaba considerada como el primer país exportador, asignándose a 1921 cinco millones
de hectolitros enviados al exterior, cifra que registramos con toda clase de reservas, por parecemos
claramente hiperbólica. Pero es evidente que a partir de quinto lustro la exportación desciende de manera
vertiginosa, hasta, quedar reducida la media del período 193235 a 1.83T.425 hectolitros, que se hizo más
baja aún en los años 194648, enque apenas fui superado el medio millón de hectolitros.
Pero al considerar esta circunstancia hay que tener en cuenta también el ininterrumpido aumento de
población, y por consiguiente el mayor consumo, lo que explicaría el hecho de qua no se hayan planteado
graves problemas de excedentes, si bien en previsión de que esto pudiese llegar a ocurrir mientras no
resulta posible recuperar los antiguos mercados, se ha racionalizado el cultivo en lo que se refiere a
nuevas plantaciones, fisto no quiere decir qua no deba cuidarse, como se cuida en efecto, nuestro signo
exportador, en especial en lo que concierne a mostos de alta calidad, pues ciertas clases de éstos, no sólo
no encuentran fácilmente sustitutivos en el exterior, sino que mantienen un lugar preeminente en el
mercado mundial. En las cifras que damos a continuación se refleja la evolución de las exportaciones, por
clases de vinos, comparadas las de los años 193235, con las de 1959:
Cantidad media exportada en 193235, 1,837,425 hectolitros,
Exportación en 1939, 1.402.06S hectolitros. 3o que representa una disminución del 27 por 100. Esos
1.402.088 hectolitros se descomponen asi, por clases de mercancía:
Hectolitros
Coñac........................... 33.321
Vinos espumosos ,., ............ 2,992
De Rioja, en pipas............ 61.944
De Rioja, en botellas ........ 20.706
De Málaga, en pipas ............. 40.645
De Málaga, en botellas.......,. 3,710
De Jerez, en pipas ... ......... 190.284
De Jerez, en botellas ......... 34,862
Vinos comunes en pipas...... 717.588
Vinos comunes en botellas,.. ... ilS.069
Demás vinos finos, en pipas ... 252.750
Demás vinos finos, en botellas. 1187
ESTUDIO COMPARATIVO LA EXPORTACIÓN
Comparada la media de exportación en el período 193235 con los envíos al exterior en 1959, tenemos:
En disminución del 48 por 100 en relación con 193235, aparecen los vinos comunes en pipas, de los que
en 1958 se exportaron 717.582 hectolitros frente a la media de 1.383.890 en 193235.
E. de P.
LA UVA DE MESA Y LAS PASAS
Cuando hablamos de la cosecha de vino omitimos, por supuesto, la producción de uva de mesa. Las
especiales condiciones climatológicas de España, asi como las características de su suelo, permiten ave
entre las muchas variedades para vinificación haya siempre alguna especial para consumo en fresco o
transformada en pasas. ¡Paradisiacos parrales levantinos, almerienses y malagueñas!
Esas características de clima y suelo favorecen la expansión del cultivo de uva temprana y tardía, y ahí
están, como ejemplos, Extremadura y Centro, por no citar las regiones tradicionalmente productoras de
variedades aptas para la exportación.
Por consiguiente, al total de hectolitros de vino de una cosecha determinada hay que añadir siempre una
cifra oscilante entre tres y cuatro millones de quintales métricos de uva "comercial" y de pasas.