Los conflictos de las listas de Coalición Popular no evitaron una importante victoria
Fraga dedicó parte de la jornada a jugar al dominó
Lugo. José Balsa Muñiz
Coalición Popular dobla en número de diputados al PSOE, mientras Coalición Gallega, con tres
diputados, se convierte en la tercera fuerza de la provincia. A pesar de las frías temperaturas con las que
amaneció la provincia, la participación, por encima del 58 por 100, se sitúa en unas cotas altas para los
hábitos anteriores. Los resultados de Lugo se esperaban con especial interés por los conflictos habidos en
el tramo final de las listas electorales de Coalición Popular.
Manuel Fraga acudió a primera hora de la mañana a oír misa, y a continuación fue al cementerio de la
localidad, para rezar una oración ante la tumba de sus padres.
El jefe de la oposición recorrió posteriormente algunas calles de la ciudad, en un paseo con varios amigos,
y saludó a los vecinos del pueblo con quienes se encontró a lo largo de la caminata.
A continuación jugo una partida al dominó con varios amigos de Villalba, y se retiró a almorzar a su
domicilio. A media tarde, Manuel Fraga regresó al Bar Roca, para tomar un café y jugar otras partidas al
dominó.
El dirigente de la Coalición Popular, no obstante, se mantuvo en contacto con dirigentes y responsables
de su partido, para estar informado del desarrollo de las elecciones autonómicas.
Frío intenso
La participación -58,50 por 100- se vio perjudicada por las temperaturas extremadamente frías con las
que amaneció toda la provincia. El gran enemigo de las consultas gallegas, la lluvia, no hizo aparición.
Sin embargo, el tiempo frío en el interior de la provincia fue la tónica climatológica dominante, mientras
que en la zona costera lucía el sol e incluso se registraban colas en algunas mesas. La nota general fue una
escasa participación a lo largo de toda la mañana.
Hay que tener en cuenta que el interior de Lugo la dispersión de la población es grande y las
comunicaciones muy deficientes. El fuerte frío que se dejaba sentir en la amanecida pudo desalentar a
más de uno de emprender el camino por las «corredoiras» para acudir a su mesa electoral.
En la capital, a primeras horas de la mañana, se registraban dos grados bajo cero, y en algunas zonas el
cielo estaba cubierto por una niebla intensa. Después del mediodía, la participación subió y se formaron
algunas colas en las mesas.
La jornada transcurrió con absoluta normalidad, sin incidentes de ningún tipo. El Gobierno Civil informó
que no se había notado ninguna anomalía en la constitución de las mesas.
Como incidente más importante cabe resaltar que en una mesa de la localidad de Francos, en el Municipio
de Baradela, se paralizó la votación porque faltaban papeletas de Esquerda Galega, pero poco después se
subsanó esta deficiencia.
Por la mañana cundió la alarma en la localidad de Villalba, donde pasaba el día Fraga, cuando se
escucharon dos disparos. El Gobierno Civil comunicó que el incidente era producto de una reyerta entre
dos vecinos y que nada tenía que ver con el proceso electoral.
Al parecer, todo sucedió cuando dos vecinos sostuvieron una discusión a las cuatro de la mañana,
resultando herido uno de ellos. Posteriormente, a las diez de la mañana, cuando el herido ya fue curado en
el Hospital General del INSALUD de Vigo, y regresaba a su domicilio, cogió una escopeta y fue en busca
de su vecino y contrincante. Este, para disuadir al herido, lanzó dos disparos al aire. Momentos después
intervino la Guardia Civil, que detuvo a ambos y les incautó las escopetas.
Antonio Rosón
Minutos antes del mediodía votó en su colegio electoral el presidente del Parlamento autónomo de
Galicia, Antonio Rosón, en Lugo. Rosón llegó al colegio acompañado por algunos amigos y, tras saludar
a varias personas y a los miembros de la mesa, depositó su voto.
Antonio Rosón, que no ha podido hacer campaña por encontrarse enfermo, manifestó a los periodistas
que iba a votar «con alegría», y que espera que el pueblo gallego en este día haga que se termine con las
etiquetas que te colocan «todos tos que no entienden a Galicia».
Según los observadores políticos, los resultados de Lugo tienen una importancia peculiar, por cuanto fue
en esta provincia donde se produjo la caída de las listas de un candidato del Partido Liberal, en una
maniobra del presidente de la Diputación, Francisco Cacharro.
La «cacharrada» ha estado permanentemente presente a lo largo de toda la campaña y ha sido
profusamente utilizada por la izquierda.
Esta crisis estuvo a punto de significar el abandono de Antonio Rosón, quien terminó por cerrar filas, al
igual que los hicieron los dirigentes de los tres partidos de la Coalición.
En los ambientes políticos existía, pues, curiosidad por conocer los resultados de Lugo, también a la luz
de esos sucesos, que tanta repercusión tuvieron en la opinión pública, y sobre los que Alianza Popular
abrió una investigación que sirvió para calmar las aguas, pero que muy probablemente no dará lugar a
ninguna medida disciplinaria, toda vez que las aguas ya volvieron a su cauce, y que Manuel Fraga dio
seguridades a José Antonio Segurado de que el candidato descolgado sería recompensado.
Diputados electos
Coalición Popular: Antonio Rosón Pérez, Fernando Garrido Valenzuela, Fernando Pensado Barbeira,
Jesús Gayoso Rey, Manuel Núñez Carreira, Constantino Vila López, José Ramón Cocina García y
Fernando Rodríguez Pérez.
PSOE: Manuel Ceferino Díaz Díaz, Manuel Guillermo Várela Flores, Fernando Martínez González y
Antonio Gato Soengas.
Coalición Gallega: Cándido Sánchez Cas-tiñeiras, Luis Cordeiro Rodríguez y Celestino Torres
Rodríguez.