Calvo Serer se brinda tras el golpe militar
«El posible fracaso de una nueva experiencia parlamentaria, entre nosotros llevaría a una intervención
militar que, en el caso de producirse, debería ser de estilo europeo, es decir, manteniendo la democracia
con un régimen presidencialista.» Esta es la conclusión —según la editorial que lo presenta— a la que
llega Rafael Calvo Serer en su último libro.
Para llegar aquí dicen los editores que Calvo Serer ha tenido que hacer un análisis minucioso del proceso
constituyente, comparar la situación en , cuatro países europeos y cuatro latinoamericanos y basarse en su
propia experiencia política, que arranca desde 1936.
Esfuerzo tan meritorio y experiencia tan prolongada se resumen, pues, en la negrura de un pronóstico que
algunos juzgarán dictado por la inadaptación del autor a un país soberano de sus destinos y refractario a
cualquier tutoría. Y tras el pronóstico parece adivinarse generoso el ofrecimiento de Calvo Serer, que se
brinda para pedirles a los militares golpistas ya triunfadores moderación, mientras, con renovadas
energías, el profesor cabalgaría de nuevo en aras de la aceptación internacional del régimen salvador,
aunque ahora, eso sí, de signo presidencialista.
Quién sabe si, uña vez agotado el sistema, podría pensarse en lanzar desde París una Junta Democrática
bajo el signo de la reconciliación.