Una pérdida de más del 28 por 100 en la valoración bursátil
INFORME 1976
Por primera vez, al menos en los quince últimos años, el de 1976 se ha despedido de la Bolsa con el
índice general de cotizaciones más bajo registrado a lo largo de los doce meses, el 71,44 por 100. Quiere
decir que quienes hicieron sus compras de valores al final del año 1975 han perdido, en valoración
bursátil, el 28,56 por 100. Si añadimos a ese deterioro en el valor de la inversión bursátil el hecho de que
los importes recobrados se han visto a su vez deteriorados en poder adquisitivo por los efectos de la
inflación que, según el índice del coste de vida, rondan el 20 por 100 (faltan los resultados de diciembre),
tendremos la medida que para el inversor en valores mobiliarios ha venido a representar el año recién
concluido.
ÍNDICE DE COTIZACIÓN DE ACCIONES EN 1976
Base: 31-12-75 = 100 Máximo Fecha Mínimo Fecha
Bancos comerciales ........ 105,91 7-5 66,27 22-10
Bancos industriales ....... 111,29 6-5 78,02 22-10
Eléctricas..... 97,44 2-1 69,25 23-12
Alimentación . . . 99,62 2-1 76,66 28-12
Construcción . . . 102,08 7-5 75.24 30-12
Inversión . .... 99.62 2-1 62,46 22-12
Monopolios . . . 99,83 2-1 65,61 30-12
Minerosiderúrgicas........ 120.09 7-5 75,59 28-12
Químicas y textiles ....... 108,24
Varias....... 100,31
General . . . 100,79
7-5
7-5 7-5
76,80 30-12 74,59 30-12 71,44 30-12
Es cierto que a largo plazo—así nos lo viene demostrando la experiencia—la Bolsa cubre las pérdidas que
produce la inflación.
El índice general marca solamente promedios de la baja en el año. Las desviaciones registradas en los
distintos índices parciales no han sido muy pronunciadas. Por debajo de él se hallan el grupo de Inversión,
que es el más castigado, con una pérdida
Viene a sumarse a ella la pérdida de valor adquisitivo por la inflación • De los doce meses, el de mayo
resultó discretamente favorable y fue peor el de diciembre . Por primera vez en muchos años el último día
del año marcó el índice general más bajo • Hay razonables esperanzas para confiar en una normalización
del mercado en 1977 del 37,54 por 100, seguido del de monopolios, con baja del 34,39 por 100, y el ele
eléctricos, que al cerrar el día 30 a 69,72, arroja un porcentaje de baja del 30,8 por 100.
Por encima del índice general se halla el grupo de bancos industriales, que cerraron el año a 79,55, es
decir, con la baja menor de todos los grupos, que ha sido del 20,45 por 100. Los bancos comerciales, que
terminaron en 71,64, sólo mejoran en 20 centésimas la pérdida del general; el índice del químicas y
textiles ha perdido un 23,2 por 100.
Medido por el nivel del índice general, el momento más favorable del año fue en el mes de mayo, en que
se consiguió subir unas centésimas sobre las posiciones de final del año, para situarse en 100,79, y ha
resultado el peor, como hemos dicho, diciembre, tanto para el índice general como para la mayoría de los
índices parciales. Sólo se exceptuaron de caer en el mínimo del año, efectivamente, en el mes de
diciembre los valores bancarios, que tuvieron sus peores momentos en el mes de octubre, con un mínimo
del 66,27 para los comerciales y del 78,02 para los industriales.
FACTORES ECONÓMICOS Y FACTORES POLÍTICOS
El entorno económico en que se ha movido la Bolsa ha sido desfavorable en grado creciente. Las
esperanzas de recuperación que llegaron a vislumbrarse en febrero se vieron pronto anuladas; se desalentó
la inversión, creció casi constantemente la inflación, aumentó el paro; el déficit comercial, decreciente
hasta octubre, volvió a agravarse en los meses finales; las reservas en divisas, en constante decrecimiento;
los ingresos por invisibles, menos abundantes que en el pasado; la deuda exterior, en crecimiento. Fue
insensible el mercado a las generosas medidas y beneficios fiscales propiciados por Hacienda y de escasa
eficacia ¡ las aportaciones con que el Banco de España complementó a la demanda.
Pero si el marco económico actuó como tactor negativo, el entorno político; que ha ejercido especial
influencia en la marcha de las cotizaciones en este año, originó una serie de movimientos de recupera-
ción, en realidad poco duraderos, como el cambio de Gobierno en el mes de julio, el resultado favorable
para la reforma política alcanzada en las Cortes. Pasó, en cambio, sin pena ni gloria para el mercado de
valores el éxito del referéndum.
PERSPECTIVAS PARA 1977
Pero tal vez resulte más interesante "que el recuento de lo que ya pasó, tratar de prever lo que comenzará
a ser realidad en este nuevo año de 1977. Es siempre muy aventurado, y más en momentos como los
actuales, de tránsito en lo político y tránsito esperado en lo económico, porque, indudablemente, la Bolsa
se ha de seguir viendo influenciada desde ambas esferas. En lo económico, el nuevo año arranca para la
Bolsa desde una depresión importante. El mercado de valores, si en los comienzos del año pasado estaba
excesivamente valorado, en este año arranca con un fuerte desmerecimiento, que es de esperar haya de
ser, en parte al menos, en jugado. El Gobierno, según manifestó el ministro de Hacienda ante las Cortes,
"que ha asumido la responsabilidad de conducir la transición política, ha aceptado también el deber de
posibilitar la recuperación gradual y progresiva de la economía", lo que no dejará de pesar en sentido
positivo sobre el mercado de valores.
Y en cuanto a lo político, indudablemente, que la interrogante está en el resultado de las venideras
elecciones, pues la ideología que de ellas salga triunfante influirá fuertemente en el mercado bursátil.
Terreno seguramente resbaladizo aventurar en este sentido un pronóstico, pero tenemos una clave
bastante segura para el vaticinio en el resultado del referéndum, una de cuyas más claras conclusiones ha
sido la del rechazo, por enorme mayoría de los votos, de todos los extremismos, tanto de izquierdas como
de derechas. Con esa guía no parece ya tan aventurado vaticinar que las urnas darán su asenso a una
ideología de centro, seguramente con hondo sentido social.
Si ello es así, si la economía, como promete el Gobierno, se encauza y si desde el campo político las
presunciones razonables hacen prever la confirmación del rechazo de los extremismos, todo induce a
pensar que la Bolsa en 1977 se irá viendo normalizada y retornará a una situación de tendencia
recuperadora y, posiblemente, con cierta anticipación a los esperados resultados prácticos, tanto en lo
económico como en lo político.
I. Alonso VILLALOBOS