11-III-1980
nacional
País Vasco: fue tranquila la jornada electoral
PNV y AP incrementaron sus votos en un 30 por 100. Descalabro de UCD y progresivo descenso del
PSOE. Herri Batasuna se consolida como segunda fuerza política
Claro triunfo del Partido Nacionalista Vasco, incremente de la abstención, salvo en Vizcaya, en relación
con el referéndum estatutario; ascenso de Herri Batasuna, que gracias fundamentalmente a su mejora de
posiciones en Álava se consolida como segunda fuerza política del País Vasco; hundiendo de UCD, que
pasa al quinto puesto; progresivo descenso del PSOE, a pesar de los nueve escaños obtenidos; subida,
aunque menos de lo esperado, de Euskadiko Ezkerra; fortalecimiento notable de Alianza Popular y
estancamiento del PCE fueron laa notas características de la jornada electoral del domingo en Euskadi. Si
a ello se suma que los partidos abertzales o nacionalistas —PNV, HB y EE— han copado 42 de los 60
escaños en litigio, puede quedar completa la panorámica de la consulta. Según destacó el subsecretario
del Ministerio del Interior, Julio Camuñas, en la reunión celebrada con los medios informativos a pri-
meras horas de la mañana del lunes, la jornada se desarrolló con total normalidad. El mal tiempo, por otra
parte, contribuyó de alguna manera a incrementar la abstención. La participación no (legó en ninguna de
las tres provincias vascas al 60 por 100 del censo.
El señor Camuñas afirmó que, a tenor de los resultados, el PNV había incrementado el número de
electores en relación con otras elecciones e indicó que Alianza Popular había aumentado también sus
votos en un 30 por 100, mientras que Euskadiko Ezkerra lo había hecho en un 12 por 100 y Herri
Batasuna en un 1,9 por 100. No ofreció datos de los partidos que habían perdido votos y su porcentaje.
Tras facilitar los datos provisionales, insistió en que la abstención había sido una de las notas más
significativas de la jornada. «Habrá que esperar —añadió— a un pronunciamiento de los partidos
políticos para conocer sus causas. Yo no quiero hacer nigún juicio de valor.» Se refirió asimismo a que
todas las guarniciones del País Vasco habían sido reforzadas: el Cuerpo Superior de Policía, con 80
hombres; la Policía Nacional, con 10 compañías de la reserva, y la Guardia Civil, con 500 hombres. A
todo ello hay que sumar los efectivos de los GEO y de la unidades especíales de ¡a Guardia Civil.
Interrogado sobre las causas por las cuales el suministro de datos por el Ministerio del Interior se
interrumpió a las tres de la madrugada, el señor Camuñas contestó que a esa hora se disponía ya del 100
por 100 de los datos de una provincia y de casi el 80 por 100 de las otras dos circunscripciones, lo que
significaba que los resultados finales no iban a experimentar ningún cambio sensible respecto a los
conocidos a las tres de la madrugada. El subsecretario del Interior precisó que al Gobierno le preocupaba
el proceso autonómico y, en concreto, el del País Vasco, puesto que, en caso contrario, no se habrían
celebrado estas elecciones al Parlamento vasco, que son las primeras de toda la historia de Euskadi.
Poco después de conocerse los primeros resultados provisionales, Unión de Centro Democrático, en una
nota hecha pública, puso de relieve que la característica más destacada de la jornada había sido el nivel de
abstención, que perju-dia los partidos de ámbito estatal, como UCD y PSOE. Por otra parte, es fácilmente
presumible —seguía la nota— que esta abstención corresponde al voto indiferente a la autonomía. En un
análisis de datos, el partido gubernamental estimaba que los partidos nacionalistas (PNV, HB y EE)
habían incrementado sus votos, frente al descenso que se advertía en Jos dos grande partidos estatales
UCD y PSOE, con respecto a Jas elecciones del 1 de marzo.
Telegrama de Suárez
Asimismo, es de destacar el telegrama que Adolfo Suárez, como presidente del Gobierno, ha dirigido al
presidente del PNV, Carlos Garaicoechea: «Muy sinceramente —dice— le felicito, así como al Partido
Nacionalista Vasco que preside, por el éxito conseguido en las elecciones al Parlamento vasco. Espero y
me ofrezco para una intensa colaboración, entre las instituciones vascas, el Gobierna y Las Cortes
generales para el desarrollo del sistema de autogobierno previsto por la Constitución y el Estatuto de
autonomía, en la confianza de que esta colaboración es el comienzo para llevar las aspiraciones de este
entrañable pueblo vasco que desea vivir en la paz, en la prosperidad y solidaridad de los otros pueblos de
España.»