Consejo ed Ministros. Soteras deja la Enseñanza militar y pasa a la Cpitanía de Valladolid Arozarena, a Madrid; Santa María a Barcelona Diario 16. 17/04/1982. Pág. 6. Párrafos 10. CONSEJO DE MINISTROS NACIONAL 17-abril-82/Diario16 El general Sáenz de Santa María ha sido nombrado capitán general de Barcelona, pasando a la Capitanía de Madrid el general Arozarena Girón, que desempeñaba este puesto en Cataluña. Asimismo, la vacante que deja el nuevo general de Valladolid, Soteras Casamayor, hasta ahora al frente de la Enseñanza Militar, ha despertado expectación por la importancia de este cargo. Se señala en ambientes militares que el teniente general Arozarena se jubila en enero de 1983, lo que probablemente sería aprovechado para trasladar a Sáenz de Santa María a Madrid. Soteras deja la Enseñanza Militar y pasa a la Capitanía de Valladolid 1/ Arozarena, a Madrid; Santa María, a Barcelona Enrique MONTANCHEZ El ministro de Defensa, Alberto Olíart, manifestaba ayer tarde, al término del Consejo de Ministros, que en los nombramientos de los tres capitanes generales únicamente habían intervenido criterios de antigüedad . y de pases a Reserva Activa en los próximos meses, sin que hayan influido, en absoluto, las campañas de prensa de los últimos días. «La propuesta que he llevado al Consejo - manifestó Oliart- es la que había pensado inicialmente cuando despaché con el presidente Calvo-Sotelo y con el jefe de Estado Mayor del Ejército.» En relación a la decisión de traer a Madrid al hasta .ahora capitán general de Barcelona, el ministro afirmó: «Hemos traído a Arozarena porque es el general que tiene más tiempo hasta que pase a la Reserva Activa.» En medios militares se ha señalado que convenía que a Madrid, sino se destinaba a Sáenz de Santa María, destinasen a un teniente general que pudiese mantenerse un tiempo suficiente en el mando, lo que invalidaba las candidaturas de los tenientes generales González del Yerro (Canarias), que pasa a la Reserva Activa el próximo 19 de agosto, y de Polanco Mejorada (Burgos), que pasa también a la Reserva Activa en agosto. Arozarena estará al frente de la Capitanía de Madrid, si antes no es elevado a otro puesto de la cadena de mando, en enero de 1983, fecha en la que ya finalmente podría incorporarse Santa María a Madrid. «El teniente general Arozarena Girón —explicó Oliart- es un militar que ha demostrado en Barcelona una gran capacidad de actuación y acción. Tiene una gran experiencia como capitán general, tal como ha demostrado, y la Capitanía General de Madrid es importante.» Para observadores militares, no ha pasado inadvertida la experiencia de Arozarena en servicios de información, ya que es un experto en inteligencia militar, que desarrolló funciones en el desaparecido Alto Estado Mayor. El ministro de Defensa rechazó que hayan existido presiones para que Sáenz de Santa María no viniera a Madrid. Sin embargo, en medios políticos han chocado las explicaciones que ayer tarde daba el ministro en torno a este nombramiento, cuando señalaba Oliart que «Barcelona es una Capitanía de gran representación y hay problemas, que no se ocultan, de relaciones políticas, y por eso creemos que puede hacerlo allí muy bien». Parecía que Oliart confundía Jas atribuciones políticas del delegado del Gobierno en Cataluña, puesto desempeñado por Rovira Tarazona, con el destino militar de una Capitanía General que, por demás/ es considerada como «tranquila». Con respecto al nombramiento de Fernanda Soteras Casamayor como nuevo capitán general de Vallado- lid, se ha valorado con más intensidad el puesto que deja vacante: la dirección de la Enseñanza Militar. Este destino despierta expectación en medios militares y entre observadores políticos, dado que el talante del sucesor a nombrar va a servir de test para conocer las intenciones del Ministerio de Defensa en acometer la reforma de la enseñanza militar. Pinilla, a Bilbao En este sentido, el nombramiento del general Luis Pinilla para el Gobierno Militar de Bilbao ha sido interpretado como un freno a que este prestigioso general, que fue director de la Academia General Militar, ocupase el destino que deja vacante Soteras. Pinilla, que estaba en situación de disponible, ha sido objeto, en ocasiones, de hostilidades por sectores conservadores y tiene acreditado un curriculum de profundas y antiguas convicciones demócratas.