Elecciones. Gobierno de izquierda, inviable Adolfo Suárez: UCD es el cambio sin riesgos Diario 16. 20/02/1979. Pág. 15. Párrafos 20. Diariol 6/20-febrero-79 Gobierno de izquierda. Inviable Adolfo Suárez: UCD es el cambio sin riesgos Manuel Soriano MADRID, 20 (DI6). -Durante su gira electoral por Andalucía, Suárez puso de manifiesto la inviabilidad de un Gobierno de izquierda en España en los próximos cuatro años y defendió la opción de UCD como la alternativa del «cambio sin riesgo», según sus propias palabras. A diez días de los comicios, el líder centrista instó a los votantes para que ejerzan el «voto reflexivo», porque, en su opinión, está en juego algo más que la presidencia del Gobierno. «En las próximas elecciones —repitió varias veces en su periplo andaluz— nos estamos jugando el modelo de sociedad española para los próximos cuatro años.» Como baza electoral que viene jugando reiteradamente, Suárez presenta al PSOE como el partido que defiende un modelo de sociedad basado en el marxismo, ateniéndose a su programa. Con este planteamiento quiere contrarrestar la incidencia que en el electorado de centro pueden tener los planteamientos electorales de los socialistas, que enjuicia más moderados respecto al programa político del XXVII congreso de! PSOE, del que viene destacando Sa defensa que en él se hace del federalismo, la autodeterminación, las socializaciones, etcétera. Incapacidad de la izquierda Frente a su mayor contrincante electoral, Adolfo Suárez, en su gira andaluza presentó a UCD como «el gran motor de la moderación, del cambio sin riesgos, que tiene como objetivo un modelo de sociedad de corte occidental». Además, el líder centrista-apuntó que considera a] PSOE incapacitado para gobernar, no porque las instituciones del Estado le rechacen, sino por su incompetencia en el terreno administrativo, que podría provocar fuertes desajustes en la estabilidad del sistema democrático. El presidente del Gobierno también resaltó la incapacidad de las direcciones de los partidos de izquierda para controlar sus bases, que considera más radicalizadas. Este juicio lo hizo al valorar los incidentes de Atarfe (Granada), donde fue abroncado y amenazado «por ese consenso de militantes de! PSOE y PCE, a juzgar por las pegatinas de los manifestantes». El líder centrista puntualizó que !a responsabilidad de ese suceso no !a echaba a los partidos, «cuyos dirigentes, estoy seguro, desaprovarían tal actitud; es un problema de control de bases». No hay bipartidismo En función de este planteamiento general que califica de «ambigüedad en el • programa del PSOE», frente a «nuestro programa concreto», Suárez basa su negativa a aceptar, por el momento, un debate televisivo con Felipe González. Reconoce que el reto del líder socialista es «hábil e inteligente» desde su punto de vista electoral, pero no para el de UCD. Suárez estima que el programa electoral del PSOE no se corresponde con el de su XVII Congreso, donde define un modelo socialista de sociedad. Teme que en el debate televisivo, Felipe González ignore esa alternativa, que frente a la de UCD, es lo más importante a discutir, porque a su juicio es lo que se decide el 1 de marzo. Además de estas razones, el líder centrista insistió publicamente en que ei bipartidismo en torno a UCD y el PSOE «no ha cuajado en nuestro país», que es lo que en su opinión se pondría de manifiesto ante el país si se produce el debate pedido por Felipe González. EL presidente del Gobierno y de UCD estima que existen en España otras fuerzas políticas a las que les corresponde su protagonismo en la vida política del país. Moderación y responsabilidad Adolfo Suárez, que inició su campaña electoral en las circunscripciones donde UCD consiguió mejores resultados en junio de 1977, precisamente las zonas más subdesarrolladas (Galicia, Extremadura y Andalucía) viene defendiendo los conceptos de libertad, igualdad y justicia, desde la maderación y la responsabilidad de la posición de centro. El líder centrista insiste en la necesidad de que todos los españoles puedan convivir independientemente de su ideología política y también en la defensa diaria de la libertad, lo que no significa un peligro de involución, porque «un golpe de Estado no va a existir en este país», según sus propias palabras. Aparte de las fuertes protestas que Suárez recibió en Badajoz, Jerez y Atarfe durante su-gira electoral del pasado fin de semana, el líder de UCD fue aclamado en Cáceres, pueblos de Badajoz, Cádiz, Sevilla y Córdoba por sus seguidores, que en total sumaron unos miles.