La próxima entrevista Franco- Eisenhower, en la prensa italiana ABC. 13/11/1959. Pág. 34-35. Párrafos 4. LA PRÓXIMA ENTREVISTA FRANCO-EISENHOWER, EN LA PRENSA ITALIANA Destacan, también los periódicos el interés que encierra la visita de Castiella a Bonn Roma ;12. (Crónica telefónica de nuestro corresponsal.) En los veinte días de agitado movimiento y de sustanciosas consultas y cambios de impresiones que tendrá el presidente Eisenhower en tres continentes, era más que: indudable que no faltaría su presencia en España, aunque por breves horas, para tener un contacto con el Generalísimo Franco. Y hoy los máximos órganos de la Prensa italiana destacan con grandes titulares este encuentro, que, como es sabido, tendrá lugar el 21 de diciembre en Madrid, señalando que 1a invitación que el Caudillo hizo a "ike" el 31 de agosto pasado a través del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando María Castiella, cuando éste se entrevistó en Londres con el presidente norteamericano, ha sido acogida no sólo en razón a la cordialidad actual hispano-norteamericana, sino por otras potentísimas razones de tipo "geográfico" y de recíproco interés, tanto económico como estratégico, dentro del marco de la alianza atlántica. Los periódicos italianos ponen, además, de relieve que con la retirada de las tropas americanas de las cuatro bases situadas en Marruecos es evidente que se ofrecen algunas posibilidades nuevas para una mayor cobertura militar en España, sobre todo cuando se renueve, en su momento oportuno, el acuerdo bilateral defensivo entre Madrid y Washington. El hecho concreto que se deduce de los comentarios italianos es que los Estados Unidos no desconocen —sino que lo tienen muy en cuenta—el factor estratégico de primerísimo orden que es España en la defensa de Europa. Al mismo tiempo, ante la vivísima actividad viajera del ministro de Asuntos Exteriores español, la prensa italiana también destaca, la visita de Castiella a Bonn, sus conversaciones con Ádenauer, Von Brentano y Erhard y su invitación al primero y al tercero para trasladarse a Madrid, con objeto de concretar acuerdos de importancia económica y cultural, invitaciones que han sido aceptadas con simpatía, después de haberse felicitado el Gobierno de la República Federal alemana del ingreso de España en la O. E. C. E. Las paginas de ágiles y leales maniobras en política exterior, que está escribiendo Castiella—en servicio fundamental al sentido europeístico y a 1a cuestión occidental-reforzando la amistad con Francia; desvaneciendo los prejuicios británicos y reanudando con la Alemania de Bonn los tradicionales vínculos de cordialidad, se siguen con favorable atención en Italia, porque,en definitiva, tal política entraña una línea clara, en orden a la pacífica cooperación, dentro de la órbita de defensa de Europa y de todos los pueblos occidentales. La nueva etapa española, en el cuadro de una economía más liberalizada y en la efusión de unas relaciones exteriores más vivas y. eficaces en su desarrollo —contribuyendo a la paz auténtica que al mundo le es tan necesaria—se saluda en los círculos políticos italianos, no contaminados por el "snobismo" soviético; con verdadera simpatía y con los mejores augurios. Mientras tanto, en Roma y Moscú se está trabajando con intensidad diplomática para definir las modalidades de la visita del presidente de la República a la Unión Soviética. Se da por seguro que la estancia de Gronchi durará unos doce días, aunque —si se realiza la visita entre el 7 y el 10 de enero, como se desea de parte italiana— tendrá que ajustarse al calendario internacional que desde primero de año hasta avanzada la primavera prevé, además del viaje de Kruschef a Francia, la proyectada conferencia en el vértice y la visita del presidente Eisenhower a la Unión Soviética. Relacionado con la discutida visita del presidente italiano a Rusia, una agencia "fanfaniana" de Prensa ha señalado la probabilidad de que Gronchi sea recibido por el Papa en audiencia estrictamente privada antes de partir para Moscú. Por cuanto es posible interpretar esta noticia, "II Tempo", de Roma, dice que, como consecuencia de las críticas formuladas por periódicos y ambientes católicos, el jefe del Estado parece que tiene la intención de asegurar al Santo Padre que "ño dejará en la antecámara de Kruschef su condición de católico,", según expresión de la misma agencia "fanfaniana", esperando obtener de esta manera una altísima aprobación a su misión "in partibus infidelium". Esta audiencia pontificia—si la solicita el presidente de la República—sería concedida ateniéndose á la misma norma que se aplica a los jefes de Misión acreditados ente la Santa Sede, de ser recibidos, después de la primera audiencia oficial en otra privada con los miembros de su familia. Desde luego, 1o más seguro es que se celebre tal audiencia, sobre todo para restablecer de nuevo un equilibrio entre la República italiana y la Santa Sede; equilibrio ligeramente quebrantado por las oscilaciones que han producido no sólo el discutido viaje de Gronchi. a Rusia, sino unas palabras que se han atribuido al jefe del Estado como prenunciadas ante el Consejo Nacional de la Prensa hablando, en hipótesis, de una revisión del Concordato. Julián CORTES-CAVANILLAS.