MUNDO DE HOY NOTA VATICANA SOBRE LA POSTURA DE LA IGLESIA ANTE LA MASONERÍA
La consulta a los Episcopados recibió respuestas muy variadas
El «Boletín Oficial» del arzobispado de Toledo publica un documento dirigido al
cardenal primado por el prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de
la Fe, cardenal Seper, en que se expresa él criterio actual de la Santa Sede
sobre la masonería. El documento se publica en latín, con membrete de la Sagrada
Congregación para la Doctrina de la Fe, y su texto es el siguiente:
«Eminentísimo señor, muchos obispos han consultado a esta Sagrada Congregación
sobre el peso e interpretación del canon 2.335 del Código de Derecho Canónico,
que prohibe a los católicos, bajo pena, de excomunión, alistarse a las
asociaciones masónicas y a otras del mismo género.
En el trámite de un largo examen de esta cuestión, la Santa Sede consultó muchas
reces a las conferencias episcopales a las que el tema interesa de manera
particular, para conocer mejor la naturaleza actual de estas asociaciones y
también el criterio de los obispos.
La gran divergencia de las contestaciones, dando cuenta de las situaciones
diversas en cada nación, no ha permitido a la Santa Sede cambiar la legislación
general vigente hasta hoy, la cual se mantiene en vigor hasta que se promulgue
la nueva ley canónica, que prepara la competente Comisión encargada de revisar
el Código de Derecho Canónico.
En la consideración de los casos particulares ha de tenerse en cuenta que la ley
penal debe interpretarse en sentido estricto. En consecuencia, con seguridad
puede enseñarse y aplicarse la opinión de los autores, que sostienen que el
antedicho canon 2.335 se refiere sólo a los católicos que dan su nombre a las
asociaciones que realmente maquinan contra la Iglesia.
Continúa en todo caso, para los clérigos, los religiosos y los miembros de
Institutos seculares, la prohibición de Inscribirse en cualquier clase de
sociedad masónica.
Al tiempo que te comunico estas cosas, te expreso mis sentimientos de profunda
estimación. Tuyo afectísimo en el Señor, cardenal Seper; prefecto.»
El canon 2.335, a que hace referencia el actual documento, afirma lo siguiente:
«Los que dan su nombre a la masonería o a otras asociaciones del mismo género,
que maquinan contra la Iglesia o contra las potestades civiles legitimas,
incurren, por el mismo hecho, en excomunión, simplemente reservada a la Sede
Apostólica.»
Cifra.